La prohibición de que las mujeres sean candidatas en las elecciones presidenciales en Irán es contraria a varios artículos de la Constitución del país y al derecho internacional y debe ser eliminada, ha afirmado Amnistía Internacional.Mohammad Yazdi, miembro clerical del Consejo de Guardianes de Irán, órgano constitucional responsable de garantizar que la legislación es conforme a la Constitución iraní, tal como la interpretan los eruditos religiosos de Irán, y a la ley islámica, así como de evaluar la aptitud de los candidatos presidenciales, ha anunciado que las leyes iraníes "no permiten que las mujeres sean presidentas".Un total de 30 mujeres se han inscrito para presentarse como candidatas en las próximas elecciones presidenciales del 14 de junio de 2013. Hasta ahora se había prohibido a las mujeres presentarse como candidatas en este tipo de elecciones, pero existía la posibilidad de que el Consejo pudiera haber anulado esa situación en esta ocasión.La prohibición de que las mujeres se postulen como candidatas a la presidencia es contraria a varios artículos de la Constitución iraní, que afirman que debe haber igualdad para todos los ciudadanos ante la ley y exigen el respeto de los derechos de las mujeres. También vulnera claramente las obligaciones internacionales de Irán en materia de derechos humanos.La reciente declaración de un miembro del Consejo también se contradice con una declaración anterior del Dr. Abbas Ali Kadkhodaei, portavoz del Consejo de Guardianes, en 2009, cuando afirmó que no había "ninguna restricción legal" para que las mujeres se presentaran como candidatas en las elecciones presidenciales."Es increíble que se siga prohibiendo que las mujeres intenten ser presidentas en cualquier lugar del mundo", ha afirmado Hassiba Hadj Sahraoui, directora adjunta del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional."Irán debe examinar con mayor detenimiento su propia Constitución y los tratados internacionales que se ha comprometido a cumplir, y garantizar que no se impide a nadie participar en las próximas elecciones presidenciales por motivos de género, raza, religión, etnia o creencias políticas."El artículo 115 de la Constitución iraní, que se refleja también en la Ley para las Elecciones Presidenciales, dispone que los candidatos deben ser "personalidades religiosas y políticas" (rejal, en persa).También afirma que los posibles candidatos deben ser de "origen iraní, nacionalidad iraní [y tener] capacidad y experiencia administrativas", así como "buenos antecedentes, honradez y piedad, creencia firme en los principios fundamentales de la República Islámica de Irán y la religión oficial del país".La exclusión de las mujeres parece haberse hecho a partir de una interpretación del término rejal, que se emplea en el texto del artículo 115, con el significado de "hombres".En elecciones presidenciales anteriores se impidió la participación de la mayoría de los candidatos registrados en virtud de los criterios de este artículo, incluidas todas las mujeres.A pesar de la discriminación de la mujer en la ley y en la práctica, las mujeres iraníes han alcanzado un nivel elevado de educación y desempeñan papeles destacados en la sociedad, pero continúan prácticamente ausentes de los puestos en los que se toman las decisiones.Ninguna mujer ha ocupado nunca un puesto en el Consejo de Guardianes o el Consejo de Conveniencia, órgano no legislativo que resuelve las disputas entre el Parlamento y el Consejo de Guardianes de Irán.Las elecciones están previstas para el 14 de junio de 2013, y la lista aprobada de candidatos se anunciará el martes 21 de mayo.